Detienen a un traficante de droga y se intervienen 50 kilos hachís ocultos en un vehículo y varios domicilios

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Elche a un traficante de droga a mediana escala que escondía la sustancia en “caletas” para el transporte. Son huecos camuflados que se crean en vehículos u otros lugares para ocultar mercancía ilegal, como drogas, armas o dinero.

La Policía Judicial tenía abiertas distintas vías de investigación relacionadas con el tráfico de drogas y en esa línea estaban tras la pista de un individuo que se podría estar dedicando a la distribución de hachís a mediana escala, abasteciendo a otros pequeños redistribuidores de la provincia de Alicante.

Las investigaciones realizadas desvelaron que el presunto autor podría estar utilizando al menos dos domicilios distintos y un trastero para esconder hachís y lo distribuiría en vehículo a distintas poblaciones.

Las informaciones que manejaba el grupo investigador apuntaban a un porte, de una cantidad importante de sustancia, en una fecha concreta. Esas informaciones impulsaron un operativo en torno a los puntos frecuentados por el investigado. El autor fue localizado al aproximarse a uno de estos domicilios controlados. Los agentes lo interceptaron e iniciaron una requisa minuciosa en el interior de su vehículo.

La experiencia de los policías nacionales hizo que no descuidaran ningún recoveco en el registro y descubrieron unas marcas incongruentes en la tapa donde habitualmente se aloja el sistema de seguridad del airbag del copiloto. Realizando una pequeña presión de palanca consiguieron extraer la tapa y encontraron en el interior gran cantidad de hachís escondido.

Una vez trasladado el vehículo del autor a dependencias policiales se realizó un nuevo registro, más minucioso, y se halló otro nuevo compartimento o doble fondo en el maletero del turismo donde se escondía todavía una mayor cantidad de hachís.

El vehículo transportaba en total 20 kilos de droga.

Tras la detención se procedió a los registros. Los agentes acudieron a uno de los domicilios controlados donde se presumía que podría guardar más sustancia estupefaciente.

Al llegar al inmueble vieron con un menor que salía del mismo. Éste resultó ser uno de los hijos del investigado que llevaba una bolsa de plástico con un envoltorio en el interior que contenía dinero en efectivo, concretamente 260 euros en billetes fraccionados. En este domicilio se encontraron casi 400 gramos más de hachís.

En la requisa de la segunda vivienda se encontró una mayor cantidad de droga (27 kilogramos de sustancia). En esta ocasión el lugar elegido por el autor para almacenar el hachís eran unos arcones frigoríficos. Finalmente en un trastero al que acudía con asiduidad en la ciudad de Alicante se hallaron otros 300 gramos más.

La exitosa investigación conllevó la intervención de 50 kilos de hachís, distribuyéndose 20 kilos “caleteados” en el vehículo que usaba el detenido habitualmente y el resto hallados en los tres registros de los inmuebles. Esta cantidad podría rondar un valor de 100.000 euros una vez esta sustancia hubiera sido distribuida en el mercado negro.

El detenido, un español de 42 años, pasó a disposición, junto con todas las actuaciones, de los Juzgados de Instrucción de Orihuela y se dispuso el inmediato ingreso en prisión.