La rocambolesca historia de un ordenador robado en el aeropuerto, que fue a Francia, volvió a Elche y viajó a Bélgica

A principios del mes de noviembre del 2023, agentes de Policía Nacional adscritos al Puesto Fronterizo del Aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernandez tuvieron conocimiento de la comisión de un delito de hurto que habría sufrido en las propias instalaciones del aeropuerto una mujer de origen belga y afincada en Altea.

Según dijo la denunciante, el día que volaba hasta su país natal, Bélgica, con el fin de pasar las fiestas navideñas, pasó momentáneamente por las oficinas de la empresa de alquiler de vehículos situadas en el propio aeropuerto. En las oficinas, dejó en el mostrador una caja que contenía en su interior un ordenador portátil de alta gama, de una marca muy conocida, todavía precintado y valorado en 1.299 euros. La perdió de vista unos segundos y alguien aprovechó ese despiste para llevarse el paquete.

La ciudadana belga explicó a los agentes que ese ordenador portátil era el regalo navideño para un familiar que se encontraba en Bélgica y que se había decepcionado enormemente al saber que se quedaría sin regalo navideño.

Agentes de la Policía Nacional adscritos al Grupo de Investigación del Aeropuerto se pusieron manos a la obra para identificar a la persona que se habría apropiado, de manera fraudulenta, del preciado ordenador.

Consiguieron la identificación plena del presunto autor de los hechos, un hombre de origen francés y de 49 años de edad, al que se le pudo ver claramente por las cámaras de vigilancia como aprovechó un descuido de la víctima y los empleados para hurtar el ordenador y esconderlo entre sus pertenencias.

Los agentes también descubrieron que el presunto autor de los hechos se encontraba ya en Francia, pero realizaron todas las gestiones pertinentes para poder contactar con él y poder recuperar ese regalo tan esperado por su propietaria.

Tras un largo trabajo y varias semanas después, el ordenador llegó a dependencias de la Policía Nacional en el Aeropuerto remitido por el presunto autor de los hechos desde Francia y tras ser advertido de que habría incurrido en un delito de hurto tipificado en España, donde tendrá que comparecer personalmente por los hechos.

Finalmente, el regalo de Navidad pudo ser entregado a su legítima propietaria, que agradeció a los agentes poder entregárselo a su familiar en Bélgica justo a tiempo y antes de que acabaran las fiestas navideñas.